Hace 14 años logró el título de la Copa Sudamericana
Sorteó rivales como Alianza Lima, la Católica de Chile, Santos de Brasil y Atlético Nacional de Colombia
Escribe: JUAN CARLOS ESTEVES
En tiempos de fracasos y desilusiones en nuestro fútbol, cuando todo eran resultados adversos y la alegría estaba desinflada, un club de provincia puso el nombre del Perú en lo más alto del balompié sudamericano. Fue Cienciano, el equipo cusqueño que el año 2003 logró el título de la Copa Sudamericana ante el asombro de todo el continente.
Fue como un día de hoy de hace catorce años que el equipo “Papá” como lo empezaron a llamar se tumbó a un grande de América: el River Plate de Argentina.
En la primera final realizada en el Monumental de Núñez una semana atrás, Cienciano ya había dado el primer golpe al empatar en Buenos Aires 3-3. En el equipo “Millonario” militaba Javier Mascherano (ahora en el Barcelona), el chileno Marcelo Salas, Maximiliano López, Marcelo Gallardo (actual entrenador de River), entre los principales.
Por el equipo peruano dirigido por el recordado Freddy Ternero, brillaban el arquero Oscar Ibáñez, Santiago Acasiete, Carlos Lugo, Juan Carlos Bazalar, Julio García y el goleador del torneo el “Avestruz” Germán Carty.
La segunda final no se pudo jugar en el estadio cusqueño Garcilaso de la Vega, escenario histórico de los partidos anteriores. La Conmebol argumentó que el aforo no era el adecuado para un encuentro de tal envergadura. En realidad los argentinos no querían jugar en una ciudad de más de 3400 metros sobre el nivel del mar.
PARTIDO EN AREQUIPA
Entonces Arequipa y su estadio, fue la elegida. La UNSA lució esa noche del viernes 19 un lleno total. Arequipeños, pero principalmente los cusqueños fueron una algarabía de principio a fin. Pero la verdad, la fiesta le perteneció a todo el Perú.
La oncena cusqueña que saltó al campo de juego fue con Oscar Ibáñez en el arco; Alessandro Morán, Santiago Acasiete, Carlos Lugo y Giuliano Portilla en la defensa; Juan Carlos La Rosa, Juan Carlos Bazalar, Julio García y Paolo Maldonado en la volante; Rodrigo Saraz y Germán Carty en el ataque.
El partido fue disputado de principio a fin. La primera parte quedó cero a cero y con ese resultado el “Papá” ya era el campeón, por los tres goles de visita que había convertido en Buenos Aires. En la complementaria, River salió a ganar y campeonar, pero Cienciano quería la gloria.
Fue a los 78’ que un tiro libre a favor del cuadro rojo, se transformó en gol tras un buen disparo del paraguayo Carlos Lugo. El estadio arequipeño estalló de alegría. Todo el Perú entero fue feliz.
Cuando el árbitro uruguayo Gustavo Méndez, dio el pitazo final, los abrazos se multiplicaron en la tribuna y en la cancha. Hubo llanto, fiesta y color.
Los héroes comandados por el técnico Freddy Ternero dieron la vuelta olímpica en medio del júbilo total. Juan Carlos Bazalar agradeció a Dios y a su hijo que estaba en el cielo. El presidente del club Juvenal Silva, paseaba por el estadio todo su orgullo.
En la final empató con River en Argentina y le ganó en Arequipa con gol de Carlos Lugo
Esa noche tanto en Arequipa como en el Cusco, la hinchada se embriagó de alegría. Recuerdo que la Plaza de Armas de la “Ciudad Blanca” fue asaltada por un mar de hinchas dispuestos a perder el conocimiento. En efecto, al otro día, cuando el cielo empezó a aclarar, vasos, botellas de licor y más de un ser humano estaban regados por todo el lugar.
Hace catorce años Cienciano fue el “Papá” de nuestro continente, lamentablemente hoy ya no pelea con los grandes. Enterrado en la Segunda División, poco a poco empieza a perder vigencia. Pero eso sí, está prohibido olvidarlo, porque el cuadro cusqueño es el primer y único club que le regaló al Perú un título internacional.