Un campeón del mundo lucha contra el racismo

Lilian Thuram estuvo en Perú y charló con Todo Sport acerca de su búsqueda por terminar con la discriminación. También habló de la actual Francia y la ‘blanquirroja’

Escribe: Renato Landívar

Fotos: Yomo Rodríguez

Mayormente los futbolistas al terminar su carrera eligen dos caminos ser dirigentes o entrenadores, el caso del campeón del mundo en Francia 1998, Lilian Thuram, es totalmente distinto pues fue ser un luchador para terminar con un mal que sigue aquejando al mundo entero: el racismo. Asegura desde su época de futbolista siempre trató de erradicarlo pero falló en el intento por la complicidad que existe de parte de las distintas autoridades.

El ex Barcelona, Juventus y Parma, charló con Todo Sport para contarnos su pensamiento contra la discriminación de todo tipo y porque continúa en la sociedad. También charló de la actual selección de Francia y de la blanquirroja, un equipo que considera muy competitivo.

Pocos son los futbolistas que dejan de estar ligados al fútbol al retirarse ¿Por qué tu elegiste ese camino?

Siempre vi que este mal del racismo existía no solo de mi época de futbolista, también desde que yo era niño. Lo he sufrido muchas veces cuando era niño pero este es un problema de las clases dominantes. Creerse superiores por tener el color de piel más claro es un pensamiento totalmente errado.

Ha pasado muchísimo tiempo desde que has vivido esto y el racismo persiste en nuestra sociedad

Es que todo parte de la educación. Esa es la base para tener mejores personas en la sociedad. Siempre que voy a los colegios y pregunto quien es negro o de orígenes indígenas. Nadie levanta la mano. Muchos creen que serán mal vistos al aceptarlo. Se necesita tener conciencia de eso, enseñarles a los más pequeños que todo somos iguales tengamos el color de piel que sea.

¿Viviste el racismo? ¿Cuánto te afectó al vivirlo?

Fue un golpe para mí. No al punto de perder mi autoestima. Crecí en una sociedad donde ya había construido una estima de mí mismo y donde vi gente que hacía cosas muy importantes. Si hubiese nacido en París,  hubiera sido más violento para mí.

Imagino que de futbolista viviste gritos racistas de parte de los hinchas rivales

Muchísimas veces pero los dirigentes me decían que no haga mucho escándalo sabes. Siempre querían que no lo digamos en la prensa y para mí eso era ser cómplice. Igual yo lo hablaba, siempre que debo decir algo lo hago, no puedo quedarme aguantándome algo.

Entonces nunca crees que esto de la discriminación termine

Será una lucha constante, porque el discurso que domina es el discurso de los que dominan. Y la gente que está dominada lo está mentalmente también. No existe un discurso que lo contradiga.

¿Y como has visto el tema en el Perú?

Para entender el racismo en el Perú, hay que regresar hasta la época de la conquista. Europa dijo que el mundo le pertenecía y lo increíble es que aún se dice que Cristóbal Colón descubrió América, a pesar de que ya había millones de habitantes. Europa decidió que los blancos eran superiores a los otros. Entonces, el racismo es ante todo la construcción de un discurso.

En casa es el primer lugar donde tratas de reforzar el tema

Siempre, trato de hacer los ejercicios en mi casa primero. Pero una vez quedé sorprendido de mi hijo menor. Cuando le pregunte ¿hijo aparte de ti quien más es de negro en tu salón de clases? Su respuesta me sorprendió cuando me dijo “ Papá yo no soy negro, soy marrón”.

Tus hijos también eligieron el camino de ser futbolistas

Quería que mis hijos (Marcus y Khephren) se quedaran en casa tranquilos, sin presión, o haciendo judo o esgrima, pero han acabado jugando al fútbol. Estoy seguro les irá de gran forma.

¿Extrañas ser futbolista?

Fue una buena etapa de mi vida. El fútbol me eligió a mí. Fue muy fácil, porque en las Antillas todo el mundo juega fútbol, pero no pensé que sería profesional. Logré mucho y eso me tiene contento.

¿Qué recuerdos del campeonato Mundial en Francia 1998?

Los mejores, unimos al país con el campeonato que hicimos. Fuimos un equipo muy sólido. Siempre las individualidades potenciaron el colectivo. Recuerdo también los dos goles que hice con Croacia. Hasta ahora no puedo creerlo porque no era de hacer goles. Todos durante el torneo tuvimos nuestro momento y ayudamos a lograr el título.

La final la ganaron por un amplio marcador cuando con Brasil habían llegado muy parejos

Cuando entramos a la cancha, vi a los brasileros y dije no hay formar de perder. Es que ellos eran 11 buenos jugadores pero nosotros en ese estadio repleto de franceses éramos miles. Tuve la suerte de ganarlo ante mi familia, amigos, es una experiencia para la que me faltan palabras. Es un sueño de infancia. Además, tuvimos al mejor Zinedine Zidane en ese equipo. Ha sido un honor compartir equipo con él.

Y este equipo de Francia, último campeón del mundo ¿Cómo lo viste?

Me gustó porque era un equipo de buenos jugadores buscando el bienestar del equipo antes que de cada uno. Tenía buenos futbolistas como Mbappe, Pogba y Griezmann, quienes marcaron la diferencia y junto al resto del equipo llevaron a Francia a otro campeonato.

Perú fue su rival en fase de grupo

Fue un equipo muy competitivo. Mostró un buen juego pero no logró  pasar de fase. Igual vi jugadores que pusieron en aprietos y le hicieron un gran partido a Francia, que terminó siendo la campeona.

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