El dirigente máximo del fútbol mundial está en Lima. El suizo italiano Gianni Infantino se reunirá con los máximos representantes de los países sudamericanos y de Latinoamérica. Anuncian que tratarán el tema del futuro del fútbol juvenil y femenino. Ayer lo fueron a recibir al aeropuerto Edwin Oviedo y el Nene Cubillas, quienes serán los anfitriones del mandamás de la FIFA. Es la oportunidad para que se sepa la realidad de nuestro fútbol y que no solo se impresione con el hecho de haber clasificado al Mundial. Eso es una golondrina que no hace verano.
Infantino es el sucesor de Joseph Blatter. Un dirigente que durante su gobierno se rodeó de sanguijuelas que todo lo veían dinero sucio. Que la soberbia y arrogancia los obnubiló creyéndose el todo poderoso del orbe lucrando con un producto llamado fútbol. Hicieron lo que quisieron en el ente rector del fútbol mundial y por eso hoy purgan condena, otros escondidos debajo de su cama y con su dinero sucio pagan cauciones para someterse a arrestos domiciliarios con la conciencia cochina de haber delinquido creyendo que nunca se iba a descubrir la verdad.
Hace un par de años, después que sucedió todo este escándalo del FIFAGATE, un colega y amigo argentino me contó algunas cosas que sucedían en la Conmebol. “Ahora lloran esos soberbios de M. Cuando vendieron los derechos de las últimas tres Copas Américas en 80 millones de dólares y sabes a cuanta la revendía la empresa que les compraba esos derechos a 220 millones de dólares. De esos 140 millones que era la ganancia coimeaban al Comité Ejecutivo de la Conmebol para que siempre voten por esa cifra. Manuel Burga piteó en una asamblea y le hicieron la cruz. No le aprobó el balance a la Conmebol y Grondona le dictó “sentencia de muerte”. Por eso puso a ese árbitro Loustau para que los perjudicara ante Uruguay en las eliminatorias pasadas, cuando Lugano le rompió la cabeza a Paolo Guerrero y el árbitro se hizo el pelotudo. Claro pues, ahí estaba el uruguayo Eugenio Figueredo, quien manejaba Conmebol por ese entonces, en la tribuna viendo el partido”.
Me dio bronca lo que me contaba. “Manuel Burga juntó a los cinco países chicos de Sudamérica para que firmen la protesta. Por eso Mac Nicolls, el chileno lo acusa del sumo interés para obligarlo a firmar. Y por eso sospecharon de él y hasta lo metieron preso. El chileno fue sucedido por Jadue, otro tipo asqueroso, arrogante. A él le dieron el poder para que haga la Copa América Chile 2015. Viste que no fue ningún dirigente de la Conmebol a Chile. Se orinaban en los pantalones. Ya sabían que se le venía el roche. Cuando saltó primero el FIFAGATE empezaron a temblar. Todo ese dinero sucio que ganaron no compensan con el desprecio de la gente. ¿Quieres saber algo más mi querido Mencho?, me dijo en aquella oportunidad. Y yo le creí porque siempre está bien informado.
Ahora esas lacras purgan condenas. El pope mayor está refugiado en una clínica poniendo cara de estúpido para que no se lleven al lugar donde debe estar. Así son los sinvergüenzas, valientes en la opulencia y cobardes cuando se les viene la noche.
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