Los técnicos también juegan

Columna Pisando el área
Columna Pisando el área

Por Renato Landívar

“Los que juegan son los futbolistas, yo no juego”, asegura el técnico de Alianza Lima Pablo Bengoechea en conferencia de prensa evitando aceptar le ganó el duelo táctico a su colega chileno Nicolás Córdova. Porque el triunfo íntimo se gestó desde la pizarra y fue ejecutado tal como estuvo estipulado para este clásico del fútbol peruano ante la ’U’.

Con la claridad de siempre, el entrenador intuyó el cansancio del equipo de Universitario de Deportes  y a pesar que el 1-0 tempranero hacía ver su propuesta errónea, los 90 minutos de juego le dieron la razón. Los ingresos de Kevin Quevedo y Óscar Vílchez le dieron frescura y más atrevimiento al mediocampo blanquiazul, quien se adueñó de la zona.

Los gritos desaforados del ‘Profesor’ para que después de recuperar el balón busquen a Quevedo y así desequilibrar, aunque si este no podía terminar en peligro de gol debía hacerlo en un córner. Así llegó el gol,  por un córner. Para ratificar, aunque el técnico no quiere aceptar, el estilo uruguayo a través del zaguero Gonzalo Godoy.

Después tuvo la paciencia suficiente para hacerle entender a sus dirigidos debía seguir los lineamientos y no desesperarse aunque lleguen situaciones adversas, como el penal de Alejandro Hohberg. Allí, estuvo la clave en el banco aliancista con un técnico que gusta a pocos pero su jerarquía para este tipo de partidos ante el rival de siempre, al que derrotó seis veces. Los otros dos choques fueron un empate y una derrota.

En el otro banquillo Córdova hizo notar sus groseras equivocaciones al dejar en el banco de suplentes a su mejor jugador, como Pablo Lavandeira, y sacar en el segundo tiempo a Germán Denis, que permitió el adelantamiento de las líneas blanquiazules sin preocupaciones. Atrás quedó los intermitentes aciertos de su parte como la vez que en Moquegua ante Binacional hizo utilizó en el primer tiempo a Daniel Chávez para desgastar y Anthony Osorio para que convierta el gol del triunfo.