Tras un empate en los 90 minutos y el tiempo extra, el equipo de Jürgen Kloop superó a su rival en una dramática definición.
Liverpool venció al Chelsea en la gran final de la Carabao Cup, un duelo inglés que se tuvo que definir en la tanda de penales (11-10) tras un empate sin goles que estuvo lleno de buen futbol y varias acciones controvertidas.
Ambos conjuntos jugaron 120 minutos sin poder marcar, por lo que el trofeo tuvo que jugarse desde los penales. En la tanda de penales, el portero Kepa Arrizabalaga fue el único que erró su disparo tras 20 cobros.
La polémica…
Tras un primer tiempo igualado, en la segunda parte el Liverpool fue superior y la primera gran polémica cayó por un gol de cabeza anulado a Joel Matip, a los 67 minutos, por un supuesto fuera de juego de Virgil van Dijk.
En el tiempo extra fue superior Chelsea. Los de Thomas Tuchel anotaron hasta dos veces, pero los goles de Romelu Lukaku y Kai Havertz no subieron al marcador por sendos fuera de juego, el primero por apenas centímetros.
Finalmente, tras tres goles anulados, uno de los mejores 0-0 de los últimos años, una prórroga y una tanda de penaltis con 22 lanzamientos. El equipo de Anfield ganó su noveno título de la Carabao Cup, siendo los máximos ganadores de la historia de la competición.
