Real Madrid, superó por un claro 3-0 a Stuttgart y va con todo por el título.
Y es que la casta de campeón nunca se pierde. En un partido que el primer tiempo se tornaba un poco complicado, el Real Madrid, supo mantener la calma y seguir con la misma intensidad para, en el segundo tiempo, lograr tres importantes goles que lo ayudan a alzarse con la victoria.
En un primer tiempo bastante peleado por el buen juego de ambas escuadras, el conjunto blanco, saltó al campo con todas sus estrellas para, en su casa, hacer las diabluras de las que nos tienen acostumbrados y arrasar con el Stuttgart quienes venían a hacer un partido muy inteligente.
Los de Alemania, se plantearon bien y cuidaron su arco como corresponde para salir rápidamente de contragolpe. Los primeros 45 minutos, la idea del profesor Sebastián Hoene salió como anillo al dedo, yéndose al descanso con el marcador en cero pero no contaban con el comienzo arrasar del cuadro blanco en la segunda mitad.
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El segundo tiempo fue muy diferente, ya que, en un gol de vestuario prácticamente, Kylian Mbappé con el arco totalmente libre, puso el primero del partido, tras una importante corrida de Rodrygo. La alegría se apoderó del Bernabéu, quienes pedían al conjunto blanco que vayan por más.
El partido se emparejó un poco gracias a la pierna fuerte que impuso el Stuttgart que generó que al minuto 68, Deniz Undav, ponga el empate transitorio de remate de cabeza tras una pelota de un córner. Las alarmas se encendieron en la casa blanca, apretando el acelerador para asegurar el partido.
Los goles llegaron a los 83 minutos por parte de Antonio Rudiger de certero remate de cabeza, tras centro de Modric y de Endrick a los 95 minutos de juego, quien ingresó en los minutos finales. De esta manera, Real Madrid tendrá que visitar la siguiente fecha al LOSC de Francia mientars que Stuttgart, recibirá de local al Sparta Praha.