En Inglaterra se expulsará a quien expulse saliva en la cara de un jugador.
A partir de la próxima temporada de la Premier League, la emergencia sanitaria por la pandemia de coronavirus estará presente en el reglamento arbitral. Toser en la cara de un jugador será considerada una falta grave que ameritará la tarjeta roja, tanto como impedir un gol con la mano o una entrada muy violenta.
La norma está diseñada para que los jugadores no utilicen la tos como una forma de querer dañar a un rival. Sin embargo, la roja directa se mostrará solo cuando exista intencionalidad y cuando suceda eso, incluso el jugador que cometa esa infracción podría ser demandado por la justicia del Gobierno británico y ya no tendría solo consecuencias deportivas.