Por Ernesto Cavagneri
Toda federación tiene el presidente que se merece. El fútbol peruano es tan informal, tan mal manejado, tan mediocre, que tenemos a Edwin Oviedo como titular de la FPF. Como anillo al dedo, dirían algunos, ni más ni menos. Un fútbol tan desorganizado gracias a la incapacidad de un tipo que utiliza el poder que le da el sillón de la Videna, para lavar su deteriorada imagen en otros aspectos de su vida personal.
Fuentes de la misma ADFP dieron a conocer que Oviedo habló con Fredebundo Chávez, presidente de Unión Comercio, para comunicarle que el cotejo ante la ‘U’ se jugaba de todas maneras. Les giraron los pasajes a los de Nueva Cajamarca, quienes llegaron a la capital en grupos, mismo equipo de barrio, porque les dieron la certeza de que jugaban sin lugar a dudas.
Luego, el cuestionado y resistido administrador de Universitario, Carlos Moreno, conversa con Edwin Oviedo; y logra convencerlo de que el encuentro programado, supuestamente para hoy a puertas cerradas en el ‘Monumental’, no debía jugarse y así sucedió. Estamos todos locos. Hicieron venir a la gente de Unión Comercio por las puras porque ahora se anuncia que el partido será reprogramado.
Oviedo nuevamente da muestras de que no sabe absolutamente de que se trata todo esto. Está viviendo en el mundo de la pelotita peruana gracias a un accidente que nos llevó a una clasificación mundialista. La bicolor llegó a Rusia 2018, pero siguieron tirando la basura debajo de la alfombra, porque los que manejan el fútbol nacional son pésimos dirigentes, pero eso poco o nada les importa porque el fútbol les da imagen, protagonismo y están buscando un poco de prestigio el que no saben de qué otra forma obtenerlo.
La dirigencia de Unión Comercio anuncia que pedirá ganar los puntos en mesa, pero después de que Moreno le metió tremenda cuadrada a Oviedo, será difícil que los de Nueva Cajamarca se salgan con la suya. La gran pregunta es: ¿Quién o quiénes son los responsables de este nuevo episodio lamentable y ridículo del fútbol peruano? Estaremos atentos para escuchar su respuesta, señor Edwin Oviedo Picchotito.
