Por Juan Carlos Esteves
El campeonato va llegando a la recta final y a diferencia de temporadas pasadas, esta vez hay mucha expectativa por saber qué equipos se van a la Segunda División. Esto principalmente porque Universitario y Sport Boys, dos clubes de mucho arraigo popular han estado involucrados con la baja
Pero el panorama cambió en las últimas fechas. Hasta hace un mes la ‘U’ era candidato a descender por méritos propio. Su penúltimo lugar lo decía todo. Hoy tras tres triunfos consecutivos creo que ya se salvó. ¿Por qué el cambio?. Fundamentalmente porque la Comisión de Licencias de la Federación Peruana de Fútbol, increíblemente dio un paso atrás y le levantó el castigo de un año a los cremas que estaban impedidos todo el 2018 de no contratar a ningún jugador, por problemas de pagos.
Por eso, en la actualidad tendría que suceder hechos extraordinarios para que Universitario vuelva a estar comprometido con el ‘fantasma de la baja’. Pero creo que si no le hubieran permitido reforzarse como estaba estipulado desde comienzos de año, era candidato fijo para bajar por primera vez en su historia.
Por su parte, Sport Boys tras vencer al Cantolao también dejó la zona de descenso, pero todavía no está salvado. Está motivado, pero no lo suficiente como para asegurar que seguirá ganando puntos importantes. Lo que me extraña es que su hinchada no lo está apoyando en estos momentos malos. El estadio Miguel Grau no se llenó el último sábado. Muy curioso porque jugaron de local y estaba explícito que ese encuentro era casi de vida o muerte.
Pero de todos los equipos que están comprometidos con la baja, el que merece irse es el Sport Rosario. Sus dirigentes están trabajando mal y hay mucho descontento en el plantel. Salomón Libman denunció en su momento que le dieron cheques sin fondo. Hoy los jugadores ya no entrenan con normalidad por falta de pagos. Más de uno ‘ya tiró la toalla’, porque no ven seriedad de parte de su directiva. El desánimo y el desorden se vio el sábado cuando en su propia cancha fue superado por la San Martín. La verdad que el club huaracino no califica para ser un club de Primera.
Lo del Comerciantes Unidos creo que está oleado y sacramentado. La directiva tiene mucho de razón cuando dice que la FPF le impidió jugar de local en Cutervo como lo hacía desde que subió. Pero se equivocó enormemente al mantener a entrenadores que perdían y perdían, y no daban señales de poder solucionar el problema en el campo de juego. Reaccionaron tarde al contratar al buen entrenador peruano Javier Arce.
Otro club comprometido es el Unión Comercio. Pero no es la primera vez; ya se salvó con las justas en temporadas pasadas. Eso es una señal que su directiva no toma con mayor seriedad su participación en Primera. El hecho de contratar a jugadores que tuvieron buenos momentos en el fútbol peruano, y que ahora están en ‘bajada’ no les garantiza éxito. No siempre con jugadores ‘reciclados’ se puede hacer un campañón.
Ayacucho como en años anteriores también está en la mira. Ni la altura de su territorio le permite ser invencible cuando juega de local. En las próximas fechas el panorama será más claro. Que se vayan los que tienen que irse. El fútbol peruano merece clubes con mayor seriedad.
