Selección francesa llegó a París y tuvo un recibimiento a lo grande. Miles de aficionados celebraron en las calles el título mundial
Tuvieron que pasar 20 años, para que el trofeo del mundial vuelva a tierra francesa. Esta vez los hinchas ‘Galos’, no esperaban a un Zidane o Thierry Henry, sino a una joven selección con Antoine Griezmann, que había logrado el sueño mundialista y que ahora llevaba el título a Francia, desde Moscú.
De esta forma, los dirigidos por Deschamps llegaron al aeropuerto parisino de Roissy Charles de Gaulle, minutos antes de las 5:00 p. m. locales (10:00 a. m. Hora peruana). Todo París centraba su atención a la salida de los jugadores del avión. El primero en tocar su tierra natal, fue el capitán Hugo Lloris, quien llevaba con orgullo la copa.
La ministra de Deportes, Laura Flessel, fue la encargada de recibir a los jugadores franceses. El estratega Deschamps, quien ya había tocado la gloria en 1998, fue uno de los más ovacionados. Los demás jugadores del plantel, también bajaban uno a uno por las escaleras que los dirigían a un pequeño podio. Fue ahí en donde Lloris levantó la copa y las personas presentes estallaron de la emoción.
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La tristeza por la derrota en la Eurocopa hace dos años, ya era cosa del pasado. Todo un pueblo vestido de rojo, azul y blanco, gritaba el nombre de Mbappé, Griezmann, entre otros. Si la fiesta dentro del aeropuerto era una locura, fuera era cien veces más intensa.
Los jugadores abandonaron el aeropuerto. Las personas aclamaban a los ‘Bleus’, quienes no creían lo que estaba pasando. Los seleccionados se subieron a un autobús descapotable, y se dirigieron a la avenida de los Campos Elíseos, en donde la fiesta estaba por comenzar.
EN PALACIO
El presidente francés, Emmanuel Macron, recibió en el Palacio del Elíseo al plantel. Lloris, con la copa en la mano, se acercó a él y estrecharon las manos. Deschamps, quien se encontraba cerca, sonreía de ver cómo el esfuerzo, tenía sus resultados.
Minutos más tarde llegaría el resto de la selección al Palacio del Elíseo. Todos, junto con Macron y su esposa, comenzaron a posar para las fotos. El público veía la escena y les era imposible no emocionarse.
La noche caía y la Torre Eiffel, se iluminaba mostrando dos fechas históricas para los galos: 1998-2018. Por su parte, los aviones realizaban acrobacias sobre el Arco del Triunfo, proyectando los colores de la bandera francesa.
Entre cánticos, comenzados por Pogba, la selección francesa continuaba celebrando. Los hinchas vivían algo que no habían experimentado por dos décadas y que jamás olvidarán en su vida.
Locura en París tras la victoria de Francia en Rusia 2018 (Cortesia RT)
