Por Juan Carlos Esteves
Ya lo hemos dicho y escrito hasta el cansancio. Alianza Lima es un club histórico en nuestro país, pero a nivel internacional está en deuda. Cuando juega la Copa Libertadores siempre la pasa mal. Ni cuando tenía a “Perico” León, “Pitín” Zegarra, Baylón y luego a Cubillas, Sotil, Cueto, Velásquez, logró cosas importantes. En este nuevo siglo con ausencia de brillantes futbolistas en su plantel los resultados son desastrosos.
Todos recordamos la vergonzosa campaña del 2007 donde bajo el mando del técnico uruguayo Gerardo Pelusso, Alianza Lima no logró ni un solo punto. Es decir no ganó en Matute y menos en el extranjero. Apenas marcó dos tantos. Fue un desastre ante el Necaxa de México, Sao Paulo de Brasil y Audax Italiano de Chile, con jugadores de selección como Flavio Maestri, Carlos Zegarra, Johan Sotil, Joel Herrera, el arquero George Forsyth entre otros.
Realmente la mala imagen que dio el cuadro blanquiazul en el exterior fue penosa. Era el último año de Alfonso de Souza Ferreyra como presidente y lo que se vivía en Matute era una gran crisis institucional y económica. Todo eso se vio reflejado en los paupérrimos resultados futbolísticos en la Copa Libertadores.
Pero viendo la actual campaña de este 2018, que va por ese camino, al menos en ese 2007 los dirigidos por Pelusso anotaron dos goles, que por cierto nadie lo recuerda. Pero hoy, en tres partidos los blanquiazules no saben lo que es vencer la valla rival. Ante Boca Juniors de local se empató cero a cero, ante Palmeiras en Brasil se perdió 2-0 y recientemente en Matute ante Junior de Barranquilla se cayó por 2-0.
A Alianza Lima le faltan tres partidos, dos de los cuales serán en el exterior: Ante Boca Juniors y este jueves ante el Junior de Barranquilla y luego de local chocará al siempre complicado Palmeiras de Brasil. Es decir, no solo hay peligro que los victorianos queden últimos sin haber sumado un punto como en la Copa Libertadores del 2007, sino que además podrían terminar su participación en este certamen sin haber anotado un solo gol.
Esta es la principal asignatura que debe cumplir el equipo de Pablo Bengoechea en lo que resta la Copa Libertadores para el cuadro blanquiazul, sin embargo, hay mucha incertidumbre por las limitaciones de los delanteros en el torneo internacional. Recuerden que Alianza Lima no cuenta con un “9” definido, uno que esté acostumbrado a romper redes de la valla rival. Tampoco tiene delanteros por fuera, que marquen la diferencia por su habilidad y velocidad.
Este Alianza Lima versión 2018 se ha caracterizado por su escasa contundencia y precisión en el arco rival. Por eso, además, en el Torneo del Inca solo tiene dieciséis goles, es decir veintitrés tantos menos que Cristal y doce menos que Huancayo, los principales equipos de este campeonato. Hasta Sport Rosario con sus veinte anotaciones y Comerciantes con 17 lo superan.
Por todo este panorama, los hinchas blanquiazules van a terminar pidiéndole al equipo, que aunque sea marquen un golcito, para no ser el hazmerreír de todo el continente. Tremendo reto.
