Por Fernando Jiménez
La columna de ayer causó gran revuelo sobre las lacras que lucran en el fútbol de menores. Me llegan decenas de mensajes a mi correo, al face y al inbox. Voy a publicar los párrafos de lo que señalan los lectores. Un profesor, a quien conocí en ESEFUL, hace unos meses me dice: “Una vez una persona me dijo: Si te peleas con el sistema te arriman y no te dejan dirigir equipos. Un entrenador llega a la Segunda Profesional y le dice a los dirigentes que no le paguen, pero que lo dejen dirigir. Yo me pregunto: ¿Cómo vive?”
Sigue escribiéndome: “Lo de la reserva es harto conocido. Pagan hasta 12 mil soles para que los pongan en el equipo. Yo denuncié esto. Los que estaban en el sistema me grabaron y ahora aparezco como estafador. Sé que darás nombres, pero el testaferro sigue trabajando y todo sigue igual. Se dé más cosas que pasan, pero al no tener pruebas no puedo sostener mi denuncia. Lo que escribes en tu columna es cierto. Muchos pagan para ser titulares, para ser promovidos, para estar en una Sub 20, colocan a los entrenadores para que reciban a sus recomendados. Si te peleas y no aceptas a sus jugadores, te sacan al toque, así estés ganando o haciendo un buen trabajo. Ningún técnico denuncia porque sabe que lo lapidan. Una vez un agente me dijo: Ojo que nosotros manejamos el fútbol”.
Tengo que reservar el nombre del profesor para protegerlo. Pero puede ayudar en la investigación a esos sinvergüenzas. Hay decenas de cartas más que las iré publicando todos los días. Para que sientan la pegada y empiecen a temblar. Hay que ir con todo, cueste lo que cueste. Yo ya estoy viejo para orinarme en los pantalones. Solo le temo a Dios y nunca a los corruptos. Esto no puede ser posible. Me apena por los chicos pobres y talentosos que ven frustradas sus aspiraciones. Que no se crean tan poderosos esos indecentes, porque van a arruinar su futuro.
Carlitos “El Misil” Dolorier, ex crack del fútbol peruano, de los 90, me escribe esto: “Esto ocurre de hace mucho tiempo. Ahora se ha convertido en algo normal, pero lo más indignante es que no solo te cobren por probarte sino que ni siquiera te miran. Solo buscan lucrar y escogen a los recomendados. Dios te bendiga Mencho y sigue con tu denuncia, yo te apoyo hermano”.
Todo esto me causa indignación. Mi cuenta de facebook tiene más de 160 likes, 76 comentarios y más de 60 compartidos. Todos opinan, quieren justicia y que se desenmascare toda esta red de corrupción en el fútbol de menores. Ayúdenos a ayudar. No a los indiferentes. No matemos la ilusión de los niños pobres sin recursos. Dios nos va a bendecir si los apoyamos en que su talento no se vaya por la borda. Mañana la seguimos.
